miércoles, 9 de mayo de 2012

NO ME IMPORTA

Ignoro si recuerdas algo de aquellos días 
pero a mí no me importa
reconocer que extraño 
el cómplice destello de luz en tu mirada,
ese locuaz silencio que tú y yo compartíamos.

No me importa;
soy demasiado vieja
para andarme con gestos arrogantes,
vacíos, fradulentos,
como flores de plástico.

No me importa.
Yo sé que lo mejor de mí te lo llevaste
porque yo quise dártelo.
Y sé que elegí bien:
no había en esta selva
un refugio más cálido que el tuyo.

Hasta que lo cerraste a cal y canto.

Pero me gustaría 
que al menos lo recuerdes con ternura
y con una sonrisa.
Y que no lo malverses, si lo piensas
tal vez a ti también te sirviera de algo.

Escóndelo en el fondo
de uno de esos cajones que no abres casi nunca.
Luego pierde la llave
                                si me quisiste un poco.