lunes, 14 de julio de 2014

YA NO IMPORTA

Ya no importa quién fue el que dijo basta
ni cuánto nos movió la rabia ciega
pero alguien tenía que decirlo.


No está hecho el amor para las lágrimas,
si acaso ha de servir para enjugar
las que vienen de fuera de nosotros.


No está hecho el amor para la lucha
si no luchan los dos por defender
el inmenso tesoro que es amarse.


No está hecho el amor para la inquina
ni para la venganza
de quién sabe qué ofensas
que tan solo conoce el ofendido.


El amor no es poder, es compañía
independientemente de las horas
que la vida permita compartir.


El amor no posee, ama y respeta
y se alegra de ver que aquel que ama
es un poco feliz, algunas veces
en un espacio ajeno.


El amor no es presión sino sosiego;
no es castración sino fecundo gozo,
es confianza, calidez, abrazo,
es una forma de vivir la vida
sin que haga falta ni decir te amo.


No sé si estoy pidiendo demasiado.