martes, 16 de febrero de 2016

SIN EMBARGO

Nadábamos en un abrazo único
intentado borrar
la distancia insalvable de las almas.
(Francisco García Marquina)

Era todo tan nuevo como si nunca antes,
sin embargo
pisábamos terreno conocido,
cálido y confortable
como el mejor rincón de nuestra casa.

Y era tan imposible como entonces,
sin embargo
nada era tan real, tan evidente.

Y era todo tan fácil
como seguir el rastro del deseo,
sin embargo
nunca existió una cumbre más difícil.

Y era todo tan cierto.
Sin embargo
nadie vivió jamás mentira más hermosa.